“Aunque el presupuesto nunca esté balanceado
y el mercado de valores caiga,
aunque el precio de la comida se vaya hasta las nubes
y mi hijo nunca se recobre de su enfermedad,
aunque pierda mi trabajo
y aunque perdamos nuestra casa,
con todo, yo me regocijaré en el Dios de mi salvación.”
Habacuc 3:17-18 (Lenguaje actual)
y el mercado de valores caiga,
aunque el precio de la comida se vaya hasta las nubes
y mi hijo nunca se recobre de su enfermedad,
aunque pierda mi trabajo
y aunque perdamos nuestra casa,
con todo, yo me regocijaré en el Dios de mi salvación.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario